La gobernadora Hochul sorprendió a muchos neoyorquinos cuando, en su discurso sobre el Estado del Estado la semana pasada, propuso que un derecho de paso de 14 millas de largo sin usar que se extiende entre Brooklyn y Queens se convierta en un nuevo servicio ferroviario de pasajeros. Conocida como el "Interborough Express", la nueva línea propuesta se extendería desde Bay Ridge hasta Jackson Heights y potencialmente serviría a un millón de pasajeros diariamente.
Estoy de acuerdo en que necesitamos grandes ideas para resolver nuestros problemas de tránsito. Durante demasiado tiempo, la MTA ha favorecido a los residentes más ricos de Manhattan con el mejor servicio posible, dejando muchas menos opciones para otros neoyorquinos. Queens, donde nací, crecí y ahora sirvo como senador estatal, es un distante cuarto y último entre los distritos en términos de paradas de metro MTA por residente (el metro no llega a Staten Island); de hecho, gran parte de nuestro municipio es un desierto de tránsito bien documentado. Por lo tanto, la MTA debe hacer mucho más para conectar a más comunidades, especialmente a las comunidades de color desatendidas, brindando más opciones de tránsito, especialmente ferroviario.